Con récord de expositores (204, el doble que hace cinco años y un 25,2% más que el 2017), 250 novedades editoriales, un importante aumento de la presencia de libro de fondo, 500 cabeceras de revistas y 265 actividades (45 para el público infantil), la Setmana del Llibre en Català, que ya avanzaba sus novedades el pasado julio, ocupa de nuevo desde este viernes y hasta el 16 de septiembre la avenida de la Catedral de Barcelona. Será la 36ª edición, marcada, según su presidente, Joan Sala, por haberse convertido en una importante y dinamizadora cita “puente entre Sant Jordi y Navidad” capaz de “hacer incrementar significativamente las ventas de libros en catalán en el tercer cuatrimestre del año”.

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Durante la presentación de la Setmana, la presidenta de Editors.cat, Montse Ayats, ha ofrecido las “optimistas” cifras del sector, según el último estudio del Comercio Interior del Libro en España: la facturación de ventas de libros en Catalunya en el 2017 fue de 484,746 millones de euros, de los cuales, 235,760 fueron de títulos en catalán. En los últimos cinco años ha aumentado un 5%. Restando a esta cifra el libro de texto, las ventas en catalán supusieron un 26% del mercado, dato similar al del año anterior. Destaca la tendencia de crecimiento que desde el 2015 experimentan las ventas de literatura infantil y juvenil (el 2017 subió un 1,80% respecto al 2016) y de literatura para adultos ( un 2,20%). 

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Durante el 2017 se editaron 8.156 títulos nuevos (sin contar el libro de texto), aumentando el número en un 10% en los últimos cinco años, y en el 2018, avanzan Ayats y Sala, ha crecido el ensayo, tendencia que puede haber favorecido, opinan, “la actualidad del ‘procés’, del movimiento feminista y de otras cuestiones que vienen preocupando a la sociedad”.

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